Lewis Hamilton tildó de "ridícula" la regla del semáforo al final del pit-lane, que en Canadá le hizo cometer un error que le llevó a embestir a Kimi Raikkonen. "¿Cómo pueden poner un semáforo en rojo al final del pit-lane? Pero así es la norma y lo acepto. El incidente no ha variado la confianza que tengo en mí mismo, no me ha costado ni un día recuperarme. No estoy decepcionado y ya estoy deseando que llegue Magny-Cours", expresó el piloto de McLaren a los medios británicos.
El accidente en Montreal hizo que Hamilton perdiera el liderato del Mundial de Fórmula 1 en favor de Robert Kubica y además retrocederá diez puestos en la parrilla de salida del próximo Gran Premio, que se disputará en el circuito de Magny Cours. Sin embargo, el subcampeón del mundo mantiene un "estado de ánimo fuerte". "La verdad es que arruinamos todo el trabajo del fin de semana, pero con el coche que tenemos ahora mismo no hay quien pueda pararnos", añadió.
En cualquier caso, uno de los jefes de McLaren-Mercedes, el finlandés Aki Hintsa apuntó que Hamilton está ahora más preparado que en su primer año como profesional, ya que "ha mejorado física y psicológicamente desde el inicio de la temporada". "Sus estadísticas son impresionantes y todo lo que ha ocurrido en Canadá no le afectará, ni siquiera un poco. Hamilton sabe que tiene el coche más rápido de toda la parrilla y que eso le puede hacer imbatible", concluyó Hintsa.