...Labios compartidos...

 El piloto de McLaren bate casi todos los récords de efectividad de la historia para un piloto de segunda temporada y, sobre todo, para sus 23 años.

Hamilton logró en Shanghai su novena victoria en 34 carreras (un 26,4% de las que ha disputado), pero sus verdaderos hitos llegan en apartados como sus 13 poles (38, 2%), sus 21 primeras líneas (61,7%) o sus 22 podios (64,7%). Por si fuera poco, el inglés ha conseguido 203 puntos de los 340 máximos posibles a los que ha aspirado, lo que hace un total del 59,70%. Desde luego que tiene razones para no cambiar de estilo de pilotaje, como él mismo mantenía en la controvertida rueda de prensa de China.

'Pasa' de las críticas de Briatore

Hamilton salió reforzado tras una semana en la que le han llovido las críticas de todas partes, pilotos rivales incluidos, y en un circuito en el que el año pasado perdió 10 puntos en el drama de la grava anexa al carril de boxes. "No me ha distraído nada, no me importa lo que digan sobre mí", se limitó a contestar. Tampoco le dio importancia a las disculpas de Flavio Briatore por sus ataques del jueves, en los que decía que se creía Muhammad Alí sin ser aún campeón del mundo, que no había aprendido nada y que perdería de nuevo el Mundial. "No tengo ni idea de lo que ha dicho, ni me interesa", sentenció.

Hamilton da un recital

Esta vez no hubo montonera, ni coches pareados, ni blocajes de ruedas, ni intentos de arrinconar a los contrarios, ni nada que hiciera cambiar el orden que la calificación estableció entre los tres primeros. Comentaba Fernando el sábado que el circuito de Shanghai no tiene dificultades en la primera curva a la hora de mantener la posición en la salida y estaba en lo cierto. La única duda que quedaba era el saber si Lewis Hamilton saldría estresado y nervioso como en Fuji o dejaría a un lado la agonía que le atenaza en estos lances. Parece que lo consiguió.

Como premio obtuvo un hat-trick (pole, vuelta rápida y victoria) que le sitúa con un colchón de siete puntos sobre Felipe Massa a falta de la última carrera. Más de medio título en el bolsillo. La última prueba es en dos semanas en casa del brasileño, una pista que domina a la perfección, pero en la que ya no depende de sí mismo. Una victoria del piloto de Ferrari no le daría el título salvo que el inglés cayera hasta el sexto en Interlagos.

Pero en la carrera de Shanghai no hubo lugar al pleito. Lewis salió mejor que nadie y pasó por la larga primera curva con un par de cuerpos sobre Raikkonen y varios extra sobre Massa, que se quedó picando ruedas levemente. Eso fue todo en lo que a la disputa de la victoria se refiere. Como las previsiones de lluvia de BMW para 20 minutos después del inicio tampoco se concretaron, nada alteró la carrera para Hamilton.

Un ritmo inapelable

Lewis estableció un ritmo irrebatible que abrió grieta respecto a Raikkonen y Massa de forma constante. En la vuelta 5 era de 3,1 segundos respecto al finlandés y de 5,4 sobre su mayor rival. En la vuelta 10 se extendía ya a 3,9 y 7,9, respectivamente.

Cuando Massa fue el primero en parar en la vuelta 14 (igual que Alonso) la situación parecía aún más irreversible. En la siguiente entraron Lewis y Kimi a su primer repostaje. Cabe también preguntarse por la poca agresividad de Ferrari en su estrategia, que podría haber utilizado como liebre a un Raikkonen más descargado de gasolina para haber presionado al de McLaren en el inicio. MARCA preguntó por esta cuestión a Chris Dyer, antiguo ingeniero de pista de Michael Schumacher y que lo es en la actualidad del finlandés. "No, creo que hicmos una buena elección, porque pensábamos que estaríamos en el ritmo de ellos. Simplemente fuimos más lentos y no había nada que hacer", declaraba el australiano tras la carrera.

Y tanto, Hamilton venció por aplastamiento a Ferrari, que se limitó a minimizar daños. Kimi Raikkonen se fue dejando llevar hasta ser alcanzado por Massa (llegó a aventajarle en 8 segundos) y permitió que le adelantase para atenuar una mayor diferencia final a favor del británico. En lugar de nueve puntos serían siete y alguna esperanza más para el último capítulo en Brasil.

Por su parte, Alonso se movió en tiempos bastante similares a los de Massa durante la carrera y mantuvo a raya a los BMW y a Kovalainen, que reventó una de sus ruedas en la vuelta 34 y que acabó abandonando en la 49. Esta escena hizo temer porque a Hamilton no le aguantará su juego de gomas blandas en las últimas 18 vueltas de carrera, pero su ventaja era tanta (unos 12 segundos) que le permitió cuidarlos y acabar sin problemas.

Hamilton: "Es un paso más, pero todavía no pienso en el título"

Lewis Hamilton ganó y convenció en China y tiene el título en el bolsillo, ya que le saca siete puntos a Felipe Massa a falta de la carrera final. Pero el británico no se fía. "Todavía no he pensado en ello, de lo cerca que estoy. Hoy he dado un paso más. Ahora nos centraremos en la carrera de Brasil y esperamos conseguirlo", comentó el piloto de McLaren.

Sobre la carrera, en la que además de la victoria logró la vuelta rápida y la pole, señaló: "Posiblemente he realizado una de las mejores salidas de mi vida, he llegado a la primera curva solo, he tomado fácilmente las siguientes y he podido comenzar a destacarme".

Por último, afirmó: "Después de mi segunda parada he tratado de cuidar los neumáticos y el motor para llevar el coche a la meta. Tenía una buena ventaja y era inevitable que Kimi dejara pasar a Felipe, pero yo tenía la situación controlada. La verdad es que no ha sido muy difícil, cuando vas el primero y tienes una buena ventaja, sabes que puedes apretar un poco mas si lo necesitas, es solo cuestión de hacerlo con cabeza y no perder la calma".